El vidrio en decoración de interiores

La decoración de interiores con vidrio se ha integrado con éxito a los ambientes modernos, y no sólo se utiliza en puertas y ventanas, sino también como divisor de espacios, en pisos,  paredes, techos y en infinidad de objetos decorativos.

El  vidrio laminado ofrece una gran seguridad,  ya que ante una eventual ruptura la malla metálica de su interior mantiene unidos los fragmentos y no constituye ningún peligro especialmente en divisores de ambientes, pisos o incluso escaleras.

El vidrio templado de seguridad al romperse se fragmenta en trozos muy pequeños, que no cortan por lo que reduce considerablemente el peligro. El vidrio de doble acristalamiento con agregado de aluminio es el adecuado para decorar pisos o pavimentos.

El vidrio endurecido o semi-templado se puede utilizar en la actualidad para aplicaciones que antes resultaban impensables por temor a rupturas, y el peligro que implicaba.

El vidrio como elemento de decoración queda muy bien en lugares en los que no se había utilizado hasta la fecha como en baños y cocinas. Combinado con acero en mesadas de cocina tiene una gran aceptación y además resulta higiénico y decorativo.

Los vidrios decorativos ofrecen en la actualidad y gracias a las  más avanzadas tecnología un abanico de aplicaciones. Con tratamientos anti-bacterias y antirayas, diseños ya sea grabados o estampados incluso mediante un proceso digital, en tonos que van del brillante al mate, son sin duda una muy buena opción para darles a los espacios de la casa un toque vanguardista, original y sumamente decorativo.